Uribismo envenenado prepara nueva oleada sangrienta de venganzas contra la izquierda y el movimiento popular colombiano
Ayer se dieron las exequias del ex senador ultraderechista y candidato uribista a la presidencia de la república, señor Miguel Uribe Turbay (nieto de un expresidente gorila y torturador en los años 70 del siglo XX), quien fue objeto de un atentado que la inteligencia policial quiere ubicar en cabeza de la Segunda Marquetalia, que lidera Ivan Márquez, como autoría intelectual, pero que el presidente Petro (con mayor información) piensa tiene otros móviles en la encumbrada criminalidad articulada con las mafias boyacenses de las esmeraldas a las cuales está ligado por deudas Miguel Uribe Londoño, el padre del senador occiso.
El evento mortuorio diseñado por la ultraderecha fue utilizado por el jefe de las bandas neofascistas colombianas, hoy en prisión domiciliaria, con 12 años de condena por varios delitos que implican fraudes procesales y manipulación de testigos, para proyectar una nueva campaña de venganzas y exterminio de la izquierda y sus líderes en el movimiento social y agrario.
En un mensaje enviado desde su mansión en Medellin, Uribe Velez (Caballista mafioso del ubérrimo) arremetió, sin atenuantes, contra la Unión Patriótica, el movimiento político surgido de los acuerdos de paz en los años 80, a la que acusa con toda clase de inventos y mentiras para justificar el exterminio de que ha sido víctima en las últimas décadas por parte de los grupos paramilitares y mercenarios entrenados en las brigadas militares y comandos de la policía con apoyo israelí; exterminio en el que aparecen vinculados generales e integrantes de los cuerpos armados (comparecientes en la Jep), como sucedió con el magnicidio del senador de izquierda Manuel Cepeda, el padre del también senador Ivan Cepeda, objeto de la más feroz arremetida desde la bandas reaccionarias de la ultraderecha, encabezadas ahora, también, por los dos hijos de AUV: Tomas y Jerónimo Uribe
Las amenazas también involucran al presidente de la Republica, doctor Gustavo Petro, quien ha dicho que el prisionero de marras sigue envenenando el campo político nacional para dar inicio a otra de sus campañas sangrientas contra la izquierda colombiana, como aquella otra que cerro con casi 7 mil falsos positivos ejecutados por decenas de oficiales del ejército, de la Fuerza Aérea y de la Marina colombiana.
Esta advertido todo el campo político del movimiento popular de lo que está en camino, lo que hace necesario recuperar la movilización social y democrática frente a esta siniestralidad organizada desde la prisión domiciliaria de Uribe Velez en Medellin, razón de mas para que desde el poder judicial se ordene su prisión intramural en una de las cárceles de alta seguridad.
* Imagen: Entierro del senador y precandidato Miguel Uribe, este 13 de agosto, en el Cementerio Central de Bogotá
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